En el mundo del diseño gráfico y la impresión, el concepto de «sangrado» desempeña un papel crucial en la calidad final de tus proyectos impresos. En este post, exploraremos qué es el sangrado, por qué es importante y cómo asegurarte de incluirlo correctamente en tus diseños para obtener resultados profesionales.
¿Qué es el sangrado?
El sangrado o sangría, también conocido como «bleed» (si usas una app en inglés), se refiere a la extensión de los elementos de diseño más allá de los límites del tamaño final de impresión. Este espacio adicional permite cortar el papel sin dejar bordes blancos no deseados alrededor del diseño, garantizando un acabado limpio y profesional.
¿Por qué es importante el sangrado?
La inclusión adecuada de sangrado en tus diseños evita posibles errores en el corte final del material impreso, asegurando que las imágenes y los colores se extiendan completamente hasta el borde de la página. Sin sangrado, es probable que las impresiones resulten con márgenes blancos no deseados, lo que puede afectar negativamente la presentación y la calidad del producto final.
Cómo incluir el sangrado en tus diseños:
- Amplía tu diseño: Extiende los elementos visuales (colores, patrones o imágenes de fondo) más allá del borde de corte en al menos 3 mm. Si por ejemplo, tu documento debe tener un tamaño final A4, con una sangría de 2mm debería medir 214x301mm y que los elementos del fondo lleguen a los límites del documento.
- Utiliza marcas de corte: Agrega marcas de corte en los límites del tamaño final del diseño para indicar dónde se realizará el corte final.
- Confirma con tu imprenta: Antes de enviar tu archivo para impresión, asegúrate de verificar las especificaciones de sangrado con tu imprenta para evitar problemas inesperados durante la producción.
Conclusión:
El sangrado es un aspecto fundamental en la de impresión que no debe pasarse por alto. Al comprender su importancia y cómo incorporarlo correctamente en tus diseños, puedes garantizar un acabado profesional y atractivo en tus proyectos impresos.